Esta es una de las primeras preguntas que nos hacemos cuando adquirimos una AR (o que nos deberíamos hacer). No es nada infrecuente que en las tiendas se equivoquen al sexar al animal y nos vendan hembra por macho o al revés, así que es fundamental que nosotros mismos sepámos qué tenemos en casa.

La diferencia principal entre machos y hembras consiste en la distancia que hay entre el ano y el genital. En los machos ésta distancia es grande, de más de 1cm, en cambio en las hembras la vulva puede estar pegada al ano completamente o ligeramente separada (ménos de 1cm).

Existen casos  difíciles de sexar puesto que la separación entre el genital y el ano es de 1cm y no es fácil decir si se trata de macho o hembra. En estos casos el veterinario es quien nos sacará de dudas mediante la exploración física (irá a buscar la presencia o no de testículos abdominales).

En las AR el celo, entendido como tal no existe, o al menos, es muy distinto a lo que la mayoría se puede imaginar.

Algo que es generalmente conocido es la dificultad de criar en cautividad con estas ardillas, a continuación veremos porqué.

El periodo de reproducción de las ardillas richardson se inicia tras la hibernación con el despertar de los machos. Normalmente, entre una o dos semanas antes que las hembras, los machos despiertan y salen a la superficie. Esta salida previa es necesaria, pues será durante esas semanas que sus testículos abdominales se exteriorizarán y empezaran a fabricar esperma.  Dos semanas después, serán las hembras quienes emerjan a la superfície.

El período fértil de las hembras es sumamente corto. Una vez han despertado, solo son fértiles durante unas pocas horas y sólo durante un día. Los machos  irán en busca de las hembras receptivas y consumaran el acto (esto tiene lugar entre el tercer/ cuarto día des de la salida de la hembra). 

El periodo reproductivo de los machos dura unas 3-4 semanas, mientras que el de las hembras apenas unas horas.

La dificultad de reproducir en cautividad yace en la hibernación. Las AR en cautividad pueden o no hibernar, pero  no se respeta el ciclo natural de hibernación que seguirían en libertad. No se reproducen los mismos tiempos ni las mismas temperaturas, y es sumamente complicado que la hembra entre en estro. 

Aún así, es cierto que muchos machos de AR en cautividad entran en celo (los que hayan hibernado tendrán más probabilidades, pero no excluye que los que no lo hayan hecho puedan entrar también) y nosotros, como sus dueños, lo notaremos en la aparición de unos testículos grandes y oscuros, y en un cambio más que notable del comportamiento del animal (se ponen territoriales, agresivos y no toleran bien nuestro contacto). En cuanto a las hembras, el signo que indica que está en periodo fértil  es su vulva.

Cuando la hembra está receptiva,  la vulva adquiere una coloración rosa brillante que atrae al macho y será sólo durante esas pocas horas que  tolerará la presencia del macho junto a sí.  Antes o después  de sus horas fértiles la  hembra no quiere ningún tipo de contacto con el macho, y la relación entre ambos es tensa y pueden aparecer pequeñas peleas.

Así pues, para conseguir una gestación en una AR se necesita que ambos hibernen, que  el macho despierte antes que la hembra, que exteriorize los testículos,que coincida que la hembra tiene sus horas fértiles y él esté preparado para fecundarla. 

Las AR adquieren la madurez sexual a los 11 meses (coincidiéndo con la salida de su primera hibernación en libertad).

El período reproductivo  tiene lugar a principios de primavera (empieza a mediados de marzo y acaba en abril) y dura 2-3 semanas. Como se explica en el apartado de "Celo", los machos serán reproductivos durante unas 3 semanas mientras que las hembras solo serán fértiles de 2-3 horas un sólo día.

Mientras la hembra está receptiva se apareará con varios machos y quedará embarazada.  Si no fuese el caso o perdiera a los bebés no será capaz de volver a quedar embarazada hasta la siguiente primavera, y es que estas ardillas no pueden tener más de una camada por año.

El período de gestación de la AR es de 23 días. Acostumbran a nacer por la noche y las camadas oscilan entre 5-8 bebés. En libertad, la hembra habrá preparado préviamente varios nidos subterráneos donde dará a luz.

Los bebés de AR pesan 6,5 gramos al nacer. Estan totalmente desprovistos de pelo, los ojos los tienen cerrados y los deditos fusionados.  A los 15 dias, ya estan recubiertos de pelo y se asemejan más a una AR, pero sus ojos aún están cerrados y no tienen locomoción. A los 20-21 días, empiezan a levantar y a mantener la cabeza sobre el suelo y a los 22-23 abren los ojos. Para el vigésimo sexto día, ya tendrán todo el pelaje nacido y empezaran a explorar los arlededores de su galería y es al mes de vida cuando salen por primera vez a la superfície y empezarán a comer sólido.

Las preciosas fotografías que vienen a continuación pertenecen a la Dra. Gail R. Michener: